"Este séptimo volumen de la serie Iberia recoge texturas incisivas, y aparentemente inocuas, que golpeaban nuestra piel hasta concentrarse en nuestros tímpanos sobreexcitados. Los sonidos no se detienen, gritan en ocasiones con fuerza, capaces de paralizar la confusión que nos rodea diariamente. Y todo ello sin que podamos ser conscientes de ello.
Es un río sónico con varios tramos entrelazados con distinta intensidad en su recorrido, con disonancias yuxtapuestas y espectros que surgen del mundo sonoro cotidiano, y que cada vez más está necesitado de protección.
Iberia VII es otro choque que truena sin amenaza nuestros oídos, retando el tumulto cansino que nos inyectan en nuestro día a día. Parecen en ocasiones extraños lo que escuchamos, pero todo tiene cabida en lo que vemos (pero no sentimos con los ojos cerrados).
Este volumen participa de un utópico mundo igual de real que la realidad conocida, aunque infinitamente más inverosímil. Con otras normas, que en vez de limitar percepciones, permiten crear el derecho a interpretar el mundo de otra manera, a través de una experiencia inmersiva (palabra ya vulgarizada hasta el extremo) donde lo terrenal y lo acuático, lo natural y lo urbanita, lo ruidoso y lo calmado, lo nuevo y lo ruinoso, en conjunción, aparece como un todo discontinuo pero solidificado mediante objetos sonoros registrados en distintos puntos de la geografía peninsular, porque estamos rodeados de sonidos, y éstos nunca se detienen".